Ha vuelto la musa a posarse
con inusitada fuerza y
singularidad,
como signo inequívoco de
renovación
en lo más recóndito de mi
ser
navegando un mar de aguas
turbulentas
donde el azul resiste a
diluirse
en un curioso laberinto de
voces y recuerdos.
Estás y estoy,
percibo tu sonrisa e
interpreto
todo lo que con ella me
trasmites,
es la viva imagen de la
esperanza,
la textura de tus palabras
hace arder mis sentidos de
placer.
De regreso a mí
trae un sinfín de
oportunidades,
vínculos y afectos
que yacían sumergidos y
aletargados
bajo las profundas aguas de
la indiferencia
en ese no yo reprimido,
por la injusticia y la
indolencia
pero ya no más,
siento que el silencio me
corroe
y hoy resurgiré con más
fuerza.
Mathmer
2019