Allí donde el mar y el
cielo se confunden
diviso tus ojos sedientos
de mi,
con esa pasión y ternura
que todo ese azul inspira.
Allí donde la naturaleza
derrama sus mejores matices,
surge tu sonrisa diáfana
cual oasis en este desierto
ahuyentando la tristeza,
surge tu sonrisa diáfana
cual oasis en este desierto
ahuyentando la tristeza,
maximizando mi alegría.
Allí donde todo es
silencio
tu voz es melodía,
trinar de jilgueros,
susurro del viento,
canto de amor
que me arrulla en
todo momento.
Allí entre sedas y
gasas
tus dedos lujuriosos
hacen mi anatomía arder,
como llama vibra con
el gozo de saber
que este hoy
perdurará en la conciencia
hasta el final de mis
días.
Mathmer 2012
Mathmer 2012