Inmersa en mis pensamientos
solo alcanzo a divisar la Sierra
cuya blancura imponente
trae paz a este corazón herido.
Por qué amarle, sino lo merece
es totalmente un espejismo
o una equivocación del subconsciente .
Abro mis brazos en busca de respuesta
y siento el témpano de la ausencia
esa que corroe el sentir
pero que hoy me hace fuerte.
No más llanto ni quejas
hay quien necesita ese amor
y ese alguien soy yo,
para luchar sin espadas
pero si con la cordura
de saber que estoy tan viva
con ansías de cabalgar
montañas, ríos, llanuras y mares
y amarme como prioridad
que no exista ser alguno
que se crea imprescindible
para poder sentir que soy amada.
Mathmer 2012
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